![]() |
||||||||||
LA LEYENDA DE LA LAGUNA DE DANJA Cuenta la leyenda que brujos poderosos provenientes de Colcamar (Cajamarca), embravecidos en una sesión de brujería, trasladaron esta laguna que por aquel entonces estaba situada en las alturas de Cocochó. Quienes vieron el poder mágico de los brujos afirman que las aguas negras y espesas de la laguna, volaban como una nube oscura por el cielo, llegando a asentarse inmisericordemente sobre una planicie de la parte baja del pueblo de Danja, donde existía una amplia vivienda con un trapiche, un perol grande de oro puro, una yunta de bueyes y obreros en plena faena de molienda para la elaboración de chancaca, los cuales fueron sepultados por sus negras y espesas aguas en silencio. Cuentan habitantes de esas zonas haber visto, en algunas noches sin luna, relucir en medio de sus aguas el trapiche y el perol de oro, esparciendo luz a su entorno con un brillo imponente, y también haber visto volar sobre la laguna, jugueteando con sus aguas, patos de oro que al acercarse desaparecen. La laguna de Danja guarda en sus entrañas esas inmensas riquezas que aún no han sido extraídas. Cuentan que cuando intrépidos buscadores de riquezas intentan acercarse en busca de sus tesoros, las aguas de esta laguna se agitan embravecidas. |
![]() |